En nuestra sociedad se hace un derroche de grandes dimensiones sin tener en cuenta el mal que se ocasiona en el medio ambiente. Podemos evitarlo si consumimos de forma responsable: comprando productos locales, rechazando envases y envoltorios innecesarios, evitando productos de usar y tirar, prefiriendo los que se pueden reciclar y por último, sabiendo en todo momento lo que estamos comprando y que verdaderamente es necesario.